La tumba VI de la necrópolis de domus de janas de Sant’Andrea Priu, conocida como la «Tumba del Jefe», la reutilizaron para el culto cristiano en dos períodos diferentes, llegando hasta el día de hoy como la iglesia dedicada a San Andrea.
La domus de janas está formada por 18 ambientes. Los tres mayores se encuentran a lo largo del eje longitudinal (fig. 1) y han sufrido notables variaciones durante la Era Paleocristiana, Bizantina y Medieval, haciendo las veces de nártex, aula y presbiterio (bema).

Fig. 1 - Tumba del Jefe, fase bizantina (de Caprara 1986, pág. 46).

El espacio de acceso (exonártex o nártex interno) se construyeron aprovechando la antecámara prehistórica original. Está caracterizado por una planta subrectangular, con una longitud de 4,20 m, una profundidad de 1,50 y una altura de 2,10 m. Una puerta con arquitrabe horizontal encima de los dos elementos portantes lleva hasta un ambiente semicircular (endonártex o nártex interno) con un diámetro aproximado de 7 metros. En el suelo se pueden observar hendiduras de la Era prehistórica colocadas en el interior de un círculo, y dos tumbas de la Era Bizantina (fig. 2).

Fig. 2 - Tumbas bizantinas (foto de Unicity S.p.A.).

El tejado del endonártex reproduce el techo típico de las cabañas de la Era prenurágica: está un poco ahuecado, tiene forma de concha y está formado por huecos radiales que parten de un relieve en semicírculo (fig. 3).

Fig. 3 - El techo del endonártex (foto de Unicity S.p.A.).

A través de una puerta con 2 metros de alto y 1,45 metros de ancho, con un arquitrabe en su parte superior, se pasa del nártex al aula (figs. 4 y 5).

Fig. 4 - La puerta a través de la cual se accede al nártex del aula (foto de Unicity S.p.A.).

Fig. 5 - Detalle del arquitrabe (foto Unicity S.p.A.).

Cuando convirtieron la sepultura en una iglesia, estos ambientes (exonártex y endonártex) conservaron sus detalles originales de la Era Prehistórica. La única transformación que sufrieron fue la excavación de las dos tumbas en el suelo del endonártex durante la fase de utilización de la Era bizantina. Los restos de ocre rojo (fig. 6) presentes en el tejado pertenecen a la Prehistoria, mientras que los restos de enlucido de encima del arquitrabe se han atribuido a la reutilización del espacio de la Edad Media.

Fig. 6 - Restos de ocre rojo en el tejado del endonártex (foto de Unicity S.p.A.).