Según la tradición hagiográfica, es decir, la relativa a los santos, Saturnino fue un joven que creció bajo la fe cristiana en el período en el que perseguían a Diocleciano (fig. 1).

Fig. 1 - Retrato de Diocleciano (de Bianchi Bandinelli, Torelli 1986, ficha 188).

Según estos relatos (una passio y una leyenda, es decir, textos en los que se exponen de forma narrativa el proceso, la detención y la ejecución de los mártires cristianos), Saturnino pasó por las inmediaciones del Capitolium (es decir, el templo dedicado a la Tríada Capitolina: Júpiter, Juno y Minerva) de Carales, durante los sacrificios en honor a Júpiter. Reconocido como cristiano por los presentes, se negó a rechazar su religión, por eso mismo fue condenado a ser decapitado. La sentencia tuvo lugar el 23 de noviembre del año 304 y su cuerpo lo sepultaron con piedad. En los días sucesivos al martirio, extrajeron su vestimenta del sepulcro y la colocaron en una cripta fuera de la ciudad, donde fue objeto de una gran veneración.

Por lo tanto, el culto de San Saturnino data de una época muy antigua, aunque su primera evidencia se podría datar a inicios del siglo VI, cuando el obispo Fulgencio de Ruspe fue obligado a exiliar del norte de África a Cerdeña por los reyes vándalos de la religión arriana. Cuando llegó a Cagliari, le solicitó un terreno iuxta basilicam sancti Saturnini, longe a strepitu civitatis (en las inmediaciones de la basílica de San Saturnino, lejos del ruido de la ciudad) al obispo Brumasio para construir un monasterio.

Posteriormente, a lo largo de los siglos, tanto el monasterio como la iglesia fueron objeto de numerosas restauraciones y reconstrucciones hasta que, en el año 1089, el juez Constantino Salusio II los donó a los monjes de San Víctor de Marsella. Tras largas obras, la iglesia fue inaugurada en 1119.

El hallazgo de las reliquias de S. Saturnino tuvo lugar el 12 de octubre de 1621 durante la búsqueda de los «cuerpos santos» realizada por el Monseñor Francisco D’Esquivel. En la catedral de Cagliari, en la «cripta de los mártires» hay una capilla dedicada al mártir: sus reliquias se conservan en el sarcófago que se encuentra encima del altar. Encima del mismo, en un nicho, está la estatua del santo (fig. 2). Dentro de la misma catedral, en la capilla de S. Isidoro, se encuentra la estatua de S. Saturnino, que fue realizada por el escultor Giuseppe Antonio Lonis en el año 1759 (fig. 3).

San Saturnino es el patrón de Cagliari y se celebra el 30 de octubre.

Fig. 2 - El altar de S. Saturnino en el «Santuario de los Mártires» del Duomo de Cagliari (de https://it.wikipedia.org/wiki/Saturnino_di_Cagliari#/media/File:CriptacattedraleCA3.jpg).

Fig. 3 - Duomo de Cagliari, altar de S. Isidoro: estatua de S. Saturnino.