Los numerosos edificios presentes en la localidad de Monte Sirai, aunque los muros en general no sean muy elevados, permiten, con la ayuda de los datos de las excavaciones arqueológicas, obtener datos útiles sobre cómo estaban constituidos los muros de construcción en varias áreas.

Las viviendas cuentan con un zócalo muy bien estructurado, generalmente alto (incluso más de metro y medio), y en algunos casos muy bien cuidado como es el caso de la Casa Fantar (figs. 1 y 2).

Fig. 1-2 - Monte Sirai: la casa Fantar y detalle del zócalo de construcción (foto de Unicity S.p.A.).

Los muros de construcción estaban hechos de piedra o arcilla cruda. En general, usaban la traquita y está documentado el uso de caliza y toba.

Para las paredes, se ha descubierto que usaban la técnica de opus africanum, es decir, sillares verticales alternados con bloques de piedras medianas o pequeñas. Podían enlucirlas también, incluso con arcilla cruda depurada. Por otro lado, el suelo solía ser de caliza sobre arcilla, y en algunos casos contaba con canaletas enterradas (figs. 3 y 4).

Fig. 3-4 - Detalle de la construcción de la ‘Casa del lucernario di talco’ (foto de Unicity S.p.A.); suelo y canaleta de la ‘Casa di tufo’ (cortesía de Michele Guirguis, 2015)

Las ventanas, en lugar de asomarse hacia el exterior, probablemente se asomaban hacia un patio interior.
También está demostrada la presencia de un nivel superior, al que podían subir mediante unas escaleras de piedra (fig. 5).

Fig. 5 - Casa del Lucernario di talco: restos de la escalera de piedra (foto de Unicity S.p.A.).