La presencia de las poblaciones fenicio-púnicas en la costa oriental de Cerdeña y, en particular, en el territorio de Tortolì, está demostrada por el hallazgo de objetos y por algunas fuentes literarias antiguas que, a pesar de que sean de la época posterior a la púnica, incluyen numerosas noticias útiles para reconstruir los acontecimientos históricos.

El poeta Claudio Claudiani, que vivió entre finales del siglo IV e inicios del siglo V d.C., en su obra De bello Gildonico, en los versos 503-526, habla de Cerdeña y la describe como una gran isla con forma de pie humano, repleta de rocas, que ocupa una posición favorable para quienes se dirigen hacia Cartago o Italia. Además, también cuenta que las embarcaciones deben tener cuidado para evitar las rocas de la costa sarda y que por este motivo hay algunas que atracan en Sulci, la antigua colonia de Cartago, mientras que otras pasan por Olbia (fig. 1).

Fig. 1 - Los versos de De bello Gildonico de Claudio Claudiano donde habla de la Sulcis oriental.

Esta escala de Sulcis, que menciona Claudiano, la mayoría de los expertos la ubica en la laguna costera de Tortolì, en el área de Arbatax-Capo Bellavista. A parte de los asentamientos más antiguos de Sulki (S. Antioco), Tharros y Karalis en el área suroccidental de la isla, también había otros en la costa oriental, indispensables para las rutas comerciales, tanto fenicias como púnicas, que llevaban hacia el centro-occidental de Italia y, en particular, hacia Etruria.

En el Itinerarium Antonini Augusti et Hierosolymitanum, una especie de registro de las estaciones y de las distancias entre las localidades ubicadas a lo largo de las vías del imperio romano, se indica el puerto de Sulcis, y esta mención también contribuye para ubicarlo en la laguna de Tortolì.

Además, Sulcis era una de las etapas de la vía litoral oriental, en Portus Tibulas Caralis. Las conexiones entre las varias localidades ya se daban en la era púnica mediante una red vial cuyos trazados solamente se pueden suponer, dado que no se pueden distinguir de los de la era romana (fig. 2). Sin embargo, sí que se ha podido saber que las vías romanas incluyeron trazados de las vías púnicas.

Fig. 2 - Las vías romana de Cerdeña. En rojo se indica el yacimiento de Sulcis (de MASTINO 2005, pág. 340, fig. 37).

Las fuentes literarias han encontrado esta confirmación en algunos hallazgos realizados durante las investigaciones arqueológicas de 1966 en las ruinas del castillo medieval de Medusa en Lotzorai, a poca distancia de la laguna de Tortolì (figs. 3 y 4). Aquí identificaron algunas estructuras de los muros de un edificio de época reciente, muy probablemente púnica, datadas del siglo IV-III a.C., por la técnica de construcción usada, idéntica en los edificios de la Sulki occidental (S. Antioco). Esta época también está demostrada por los restos de la cultura material y por su posición estratégica sobre una altura que, a pesar de que no sea muy elevada (25 metros sobre el nivel del mar), se podría identificar como un edificio militar o religioso.

Fig. 3 - La ubicación del castillo de Medusa en relación con la laguna de Tortolì (de Sardegnageoportale; reelaborado por M.G. Arru).

Fig. 4 - Los restos del castillo de Medusa, Lotzorai (de http://www.sardegnadigitallibrary.it/index.php?xsl=615&s=17&v=9&c=4461&id=253747).

El hallazgo de fragmentos figulinos púnicos y romanos en el islote de Ogliastra, delante de la laguna de Tortolì, es una confirmación adicional de la presencia púnica en la costa oriental.